08 May Estos 6 síntomas no deben ser ignorados… ¡Cuida tu vida!
Los dolores y malestares son una parte inevitable en la vida del ser humano. En muchos casos, son fáciles de tratar y pueden curarse con medicaciones simples. Sin embargo, cuando se trata de cuadros severos, es importante aprender a interpretar las señales del cuerpo.
Estos podrían estar indicando la presencia de un problema serio o incluso mortal ¡Estos 6 síntomas y afecciones son algunas de esas señales que nunca debes ignorar!
1- Debilidad en los brazos y piernas
Si sientes debilidad o adormecimiento en los brazos, en las piernas, o incluso en el rostro, podría tratarse de un accidente cerebrovascular. Una de las señales más claras es la manifestación de esta sensación en un solo lado del cuerpo, que puede estar acompañada por otros síntomas que incluyen mareo, falta de equilibrio y dificultad para caminar.
Si presentas visión borrosa, fuertes dolores de cabeza, confusión y dificultad para hablar, debes buscar asistencia médica de inmediato.
En caso de ser tratado con fármacos “destructores de coágulos” (trombolíticos) dentro de las 4.5 horas posteriores a los primeros síntomas, el riesgo de sufrir discapacidad a largo plazo puede verse reducido considerablemente, ya que los daños producidos por accidentes cerebrovasculares que son tratados a tiempo suelen ser reversibles.
2- Dolor en el pecho
Aunque existen diversos factores que pueden causar dolor de pecho, es mejor no dejarlo pasar, ya que podría ser el indicio de un problema más serio.
Si sientes opresión en el pecho o un dolor intermitente que dura más de unos minutos, debes buscar asistencia médica de inmediato.
Este tipo de síntomas pueden ser causados por una enfermedad cardíaca o un infarto, en especial si se produce luego de haber estado en actividad constante. Si el dolor es acompañado por sudoración, presión, dificultad para respirar y náuseas, debes buscar asistencia médica de inmediato.
3- Sangre en la orina
La presencia de sangre en la orina es un indicio de varias condiciones médicas que no deben ser ignoradas.
Si la sangre se manifiesta con dolor en la espalda o en el costado, podría tratarse de cálculos renales, una condición caracterizada por la formación de pequeños cristales en los riñones que se desprenden y bajan a través del tracto urinario. Esta afección puede ser detectada mediante rayos X o ultrasonido.
Si la sangre es acompañada por un aumento de la necesidad de orinar o una sensación de ardor al hacerlo, podría tratarse de una infección severa en la vejiga o los riñones. En estos casos, debes recurrir a un médico de inmediato.
Por último, si detectas sangre en la orina pero no padeces otros síntomas, tu cuerpo podría estar indicándote la presencia de un cáncer de riñón o vejiga, por lo que también debes consultar con un especialista.
4- Dolor en la parte trasera de la pierna
Este síntoma suele estar asociado a la presencia de un coágulo sanguíneo en la parte inferior de la pierna o el muslo, una condición conocida como trombosis venosa profunda.
Esto puede suceder cuando una persona ha estado sentada por largos periodos de tiempo, o a causa de una inflamación, infección o trauma físico. Debido a que los coágulos pueden desarmarse y obstruir el flujo sanguíneo, es importante obtener un diagnóstico y tratamiento temprano para evitar mayores complicaciones.
Aunque es normal sentir dolor luego de haber realizado actividad física, si sientes calor o notas un enrojecimiento en la zona dolorosa o inflamada, es hora de consultar con un médico.
5- Tendencias suicidas
Si sientes una sensación de vacío, angustia constante y pocas ganas de vivir, necesitas hablar con alguien y buscar ayuda.
Las personas que sufren de depresión deben seguir un tratamiento con psicólogos o psiquiatras que puedan ayudarlas a recomponerse y atravesar la crisis de forma exitosa.
En la actualidad, existe una gran variedad de terapias de grupo y líneas de ayuda con profesionales disponibles en todo momento.
6- Sibilancia
Si tienes dificultad para respirar o notas que lo haces con sonidos similares a un silbido, es probable que tu cuerpo este indicando la presencia de algún problema. En estos casos, es fundamental acudir a un médico para determinar si la sibilancia es causada por asma, enfermedad pulmonar, alergias severas o exposición a químicos nocivos, y determinar cuál es el mejor tratamiento para tu condición.
También, puede indicar la presencia de una neumonía o bronquitis. En estos casos, es posible manifestar otros síntomas, como mucosidad, fiebre, dificultad para respirar y tos constante.
⇒ Con información de Todo Mail