18 Feb Osos polares invaden Rusia a causa del calentamiento global
Tras la ‘invasión’ de osos polares en Nueva Zembla, Rusia, las autoridades emitieron la declaratoria de estado de emergencia.
invasión de osos polares
Unos 52 osos polares pasean con frecuencia por Beluchia Guba, el pueblo más grande de este archipiélago donde habitan unas 2000 personas, atraídos por el olor a desperdicio de comida. Esta invasión llevó a los funcionarios regionales a declarar el estado de emergencia.
El oso polar, víctima del cambio climático
No es inusual que estos osos, los carnívoros terrestres más grandes del mundo, vengan hasta las zonas habitadas.
«Vivo en Nueva Zembla desde 1983 y nunca vi una invasión tan masiva de osos polares», aseguró en un comunicado el jefe de la administración del archipiélago, Jigancha Mousin. Pero no solían quedarse tanto tiempo fuera del hielo. Esto ilustra cómo esta especie se ve afectada por el calentamiento global. Con el deshielo, el territorio en donde suele habitar y cazar se ha ido reduciendo. De ahí que el ursus maritimus, más conocido como oso polar, no encuentre qué comer.
A diferencia de las imágenes recientes de osos polares desnutridos, los que aparecen en las fotos que circulan en redes sociales, se ven bien alimentados.
Este es un indicio de un problema que va a persistir. Anatoly Kochnev, experto en ecología de mamíferos de la Academia Rusia de Ciencias, respondió al sitio de noticias The Verge, que «los osos se nutren perfectamente bien con la basura, pero al final les terminan disparando». Según el científico, estos animales solo se irán cuando hayan comido todo lo que esté a su alcance.
A esto se suma un problema de costumbre. Como les es fácil encontrar comida en los basureros, los osos polares dejan de hacer el esfuerzo de cazar, pues a falta de hielo, hay menos focas. Por eso simplemente regresan a donde les fue fácil hallar alimento. Más si lo aprendieron siendo oseznos.
La basura, elemento clave para terminar la invasión
Las autoridades rusas buscan cómo ponerle fin a esta invasión. Cabe notar que en aras de su preservación, lo mejor para ambas especies, los osos y los hombres, es que permanezcan lo más alejados los unos de los otros. Por ahora intentan sacar a los osos polares con vehículos de patrulla y perros. No obstante, la medida ha sido poco eficaz según un comunicado.
La caza no es una opción ya que está prohibida en Rusia pues se trata de una especie en peligro de extinción.
Un caso similar de invasión de osos polares se dio en el 2006, esta vez en Churchill, Manitoba en Canadá. La municipalidad cerró el basurero y organizó mejor los lugares para depositar y almacenar los desechos, creando un relleno subterráneo con paredes de concreto y barras de metal en una antigua base militar. De esta manera, se logró impedir el acceso a los osos polares.
⇒ Con información de France 24 y Proyecto Puente